Hoy nos encontramos con la madre de las lunas. La que tiene una potencialidad de amor sin freno, pero a la que solemos frenar y restringir.
¿Cómo damos amor?, ¿tiene ese amor límite?
¿Lo entregamos sólo a quienes apañamos bajo las alas?, ¿o podemos expandirlo hacia quienes no quisiéramos ni siquiera mirar a los ojos de cerca?
¿Qué nos reflejan esos marginados del amor?
¿Cómo es nuestra relación con el amor?
¿Cómo es nuestra relación con el linaje de amor en nuestra vida, en nuestra familia?
¿Cómo es el vínculo con nuestra(s) madre(s)?
La Intención es honrar. Sanar. Curar Amando(nos). Reverenciar.
Que se transforme todo aquello que aún es esquirla purulenta incrustada en la piel,
no porque no tenga la capacidad de regenerarse, sino porque nunca le dimos la oportunidad amorosa de contemplarla sin esquivar la mirada, sin ser mezquinos en nuestro dar.
Sin reconocer que todos, hombres y mujeres, somos madres latentes, y que aquello que alimentemos crecerá en nuestro nido. En nuestras manos está la salud del alimento.
Namaste! 🙏💗
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