jueves, 7 de mayo de 2020

Sintiendo




Siembra


Luna Llena de Escorpio




Entre hoy y mañana cruzamos en umbral de la luna llena en Escorpio. Escorpio es un signo vincular. En Escorpio nos vinculamos a través del intercambio. Relacionarnos es intercambiar energía, tiempo, espacio. Relacionarnos es comunicarnos.

Escorpio es un signo que está vinculado a la manera en que metabolizamos nuestras emociones, es decir la manera en que sentimos nuestras emociones en nuestros cuerpos, las movemos y las transformamos.

Evolutivamente, Escorpio nos habla de la parte alquímica de la sabiduría emocional. Sabiduría que extraemos del proceso alquímico de transformación de lo inconsciente en consciente.

Para relacionarnos necesitamos comprender al otro, y para comprendernos mutuamente necesitamos comunicarnos. Y para comprendernos, y para crecer en sabiduría compartida es decir, para evolucionar juntos- necesitamos integrar la función de las emociones en la relación. Cómo comunicar lo que nos pasa cuando las sentimos,  y lo que nos pasa cuando estamos en el proceso de transformación, es un arte y un poder.

Comunicarnos con consciencia emocional abre un campo vincular alquímico. Esta luna llena nos habla de un deseo de alcanzar un nivel más profundo de conexión con nosotros mismos que nos permita nombrar y comunicar lo que sentimos, sin miedo al juicio, al rechazo, al abandono, a la humillación. Esta es la alquimia de la transformación compartida en relación.

¿desde dónde nos comunicamos? ¿podemos situar nuestra palabra en nuestro cuerpo, en nuestro ser, y reconocer, con claridad, desde dónde nos comunicamos?

La otra persona, en su diferencia -y en su misterio-, nos atrae, sí, y también nos aterra. Atracción repulsión sentimos por el misterio sombrío o luminoso del otro, la otra. El nodo norte en Géminis abre la puerta a un ciclo evolutivo basado en la conciencia de esta dualidad.

El poder ajeno nos atrae. Bajo esta luna llena esta es una confesión que  podemos hacernos con sinceridad. ¿qué me atrae tanto de determinada persona, y qué rechazo con la misma intensidad en ella?

Esa es la danza de la sombra. La danza de los espejos. La danza de nuestra hermana sombra, nuestro gemelo oscuro.

El verdadero poder está en ser capaces de nombrar nuestros secretos más íntimos, sin vergüenza, sin culpa. Nombrarlos para nosotros mismos. La sinceridad empieza en casa.

Escucharnos alma adentro. Atrevernos a reconocer nuestra responsabilidad a la hora de no asumir el poder de nuestra palabra. A la hora de callar en vez de hablar.

¿qué apoyamos con nuestros silencios? ¿qué voces silenciamos?

Escorpio gobierna las aguas profundas de nuestra alma psiquis. Es el signo del inframundo, del misterio, de la muerte y -también- de la resurrección.

Detrás de su coraza de aparente frialdad, Escorpio siente, mucho, y profundo. A Escorpio le importa. Y es este sentimiento de amor profundo que queremos rescatar dentro nuestro, en una relación, en un proyecto, en una visión. Un sentimiento de amor y conexión que -detrás del olvido, los duelos congelados, y el dolor no metabolizado- espera secreto y oculto nuestra mirada,  nuestro despertar.

Escorpio es tabú. Escorpio es secreto. Escorpio se esconde y también -para quien llega profundo, para quien tiene la valentía de navegar agua adentro- se abre, se revela. Bajo esta luna llena en Escorpio, estemos atentos y atentas a qué deseo de comunicación se abre, alma adentro. Tiempo de confesiones inesperadas. Tiempo de palabras desenterradas. Tiempo de romper tabús.

De eso no se habla. Eso no se nombra.

De la muerte no se habla.

Del dinero no se habla.

Del sexo no se habla.

Son conversaciones íntimas. Revelan vulnerabilidades profundas. Son espacios en el que la inconsciencia, el miedo, los patrones del pasado, actúan fuera de nuestro control.

Lo que callamos nos revela.

La línea fina que separa la mentira del secreto, y la línea que separa el secreto de nuestro derecho a la intimidad se nubla. ¿qué hemos callado? ¿qué no hemos podido nombrar? ¿tenemos contacto con nuestras verdaderas motivaciones? ¿alguien o algo nos pide claridad? ¿podemos reconocer nuestras agendas ocultas en una relación, un intercambio, un negocio, un pacto?

Escorpio es un signo de duelos. El duelo es un rito de paso que nos ayuda a sacar las alas desde lo más profundo de lo que necesita reconciliación en nuestro corazón, y brotar hacia nueva vida. Ese es el poder de la transformación. De oruga a mariposa, de serpiente a águila, Escorpio renace y vuela. Escorpio es un signo de redención.

¿qué necesita perdón, reconciliación, aceptación? ¿con qué, quiénes sentimos la necesidad de reconciliarnos? ¿con qué parte de nuestro pasado necesitamos reconciliarnos? ¿con qué emoción, sentimiento, situación necesitamos reconciliarnos? ¿en qué área de nuestra vida no es tiempo para reconciliarnos? ¿qué nos resulta irreconciliable?

El nodo norte de la luna acaba de hacer su entrada en Géminis. Géminis representa el periodo de nuestra vida en el que empezamos a aprender a comunicarnos, a formar las palabras, a nombrar las necesidades.

En el inicio de nuestra vida nuestra comunicación era no verbal. Y llegaron las palabras. ¿cómo fueron acogidas? ¿qué primer cuerpo de palabras nos formó en nuestro primer entorno familiar social? ¿fuimos escuchados? ¿tuvimos permiso para hablar? ¿desde qué lugar?

Este es un tiempo en que estamos llamados a crear un nuevo cuerpo de palabras -más consciente, más presente, más maduro- para sostener nuestra comunicación abierta y receptiva en los lugares más complejos y difíciles de nombrar.

Ahí donde hay silencio no elegido, ahí donde hay secretos del pasado -donde los no dicho nos cargan y pesan- ahí, la luz de la luna llena alumbra lo que quiere ser mirado, atestiguado, reconocido y nombrado.

Uno de los planetas regentes de Escorpio es Marte. Requiere de un espíritu valiente y pionero aceptar adentrarse en la sombra y extraer su néctar. Es un camino de sabiduría, y es un camino de poder. Ese néctar es nuestra voz sincera, que renace cuerpo de palabra y nombra en resonancia : palabra, cuerpo, unión.

Qué esta luna llena ilumine el poder de nombrar lo que necesitamos nombrar. Qué nos permita abrir un espacio de escucha, duelo y reconciliación interna, con lo que sea que emerja, y necesita ser acogido y atestiguado.

Qué esta luna llena ilumine las palabras ocultas detrás de capas de creencias y miedos, detrás de nuestro control, para que las reconozcamos, les demos tiempo y espacio para que encuentren su camino hacia la luz.

Qué esta luna nos ayude a sentir la intensidad de nuestra energía emocional como una experiencia corporal que necesita ser escuchada, cuidada y atendida.  Qué esta luna llena nos ayude a encontrar los aprendizajes necesarios para no huir de la intensidad del sentir, para hacer cuerpo, para acoger y habitar lo que emerge. Solo desde ahí brota la palabra que abre puertas, que invita a la comprensión, a la integración.

Hay palabras que se las lleva el viento.

Hay palabras alquímicas que anclan el espíritu en la materia y crean. Espacios que abrimos primero bien adentro para -como mariposa de agua profunda- extraer la palabra oro, la que crea los mundos nuevos que queremos habitar.

La luna llena en Escorpio nos recuerda que para abrir las jaulas que encierran nuestro vuelo necesitamos hacer el cambio bien adentro. La historia se repite en la superficie. La libertad está fuera del bucle, y la llave en el interior.

#shamanismoemocional

Fuente: Paloma Todd - Luna de abril

Porque con el cerebro te imagino, con el corazón te amo, con el sexo te deseo y con el cuerpo te necesito.