Te conozco...antes de ésta vida, te conozco.
Te conozco y reconozco que cuando no nos buscamos nos juntamos,
el viento de la vida nos amontona.
Remolino de emociones, vidas de otras vidas que se cuecen se destilan, y titilan a lo lejos, se hacen sombra, se acobijan, están juntas y distantes, pero unidas en el rumbo en busca de la armonía.
Presas de los pesares, libres en la poesía.
Lloramos lo que sentimos, soñamos lo que anhelamos, culposas, serenas, hermosas, radiantes mariposas...