sábado, 3 de julio de 2021


Recuerda mirar arriba, a las estrellas, y no abajo, a tus pies. 
Intenta encontrar el sentido a lo que ves y pregúntate qué es lo que hace que el Universo exista. Sé curioso.
Por muy difícil que te parezca la vida, siempre hay algo que puedes hacer y en lo que puedes tener éxito.
Lo único que cuenta es no rendirse.

Stephen Hawking


 


 




Escribió Amalia Bautista, Caperucita Roja :
"Al otro lado de este bosque inmenso me espera el mundo. Todo lo que he visto sólo en mis sueños tiene que esperarme
al otro lado de este bosque. Es hora de ponerme en camino, aunque el viaje se lleve varios años de mi vida.
De pronto escucho aullar la voz de siempre, la que siempre ha logrado detenerme:
“Al lado de este bosque, niña,
sólo espera la casa en la que mueres”.


 


 

domingo, 27 de junio de 2021


 


 






Sabías que la mandíbula y la pelvis están conectadas ; la alineación y relajación de cada una afecta profundamente a la otra? 

Si la mandíbula y la garganta están relajadas, las nalgas y la pelvis también lo estarán. Cuando le explico esto a las mujeres con las que trabajo, alucinan. El 90% de las mujeres con las que trabajo tienen problemas de mandíbula y trastornos temporomandibulares : bruxismo, dolores de cabeza etc . El motivo suele diferir para cada una de ellas, pero puedo asegurar que en el 90% de los casos está conectado con su incapacidad para expresar su Voz y su Ira.

Cuando estudiaba biología, una de las asignaturas que más me fascinó fue la biología del desarrollo y más concretamente embriología: estudia la formación de un organismo completo a partir de una sola célula. Esto ya de por sí me parece, me remonto aquí porque la relación entre el útero y la mandíbula es una conexión embrionaria temprana: Aproximadamente el día 15 de la gastrulación Recordáis cuando el óvulo de une con el espermatozoide, se produce la fecundación y esa célula empieza a dividirse, primero en 2, luego en 4, luego en 8 ...

En esa fase, en un momento dado, se forman dos depresiones en el embrión. Una se convierte en la membrana orofaríngea que finalmente formará la boca y la otra es la membrana cloacal que finalmente forma las aberturas de los tractos urinario, reproductivo y digestivo. Ambas ramas permanecen conectadas incluso cuando la columna se desarrolla y crece creando un mayor espacio entre ellas. Además de esto, hay una delgada capa de tejido fascial que envuelve y mantiene nuestro cuerpo interno unido y alineado y que incluye una línea fascial desde la pelvis hasta la mandíbula. 

Si visualizas tu cuenco pélvico, con las caderas articulándose a cada lado, que se mueven y aberturas reproductivas y urológicas en la base y luego observas la mandíbula, ambas tienen estructuras anatómicamente similares: es bastante similar en estructura con las articulaciones de la mandíbula en la parte superior y la gran abertura de la boca en la base.

Cuando tu cuerpo sufre un shock, estrés, trauma o emociones fuertes como la ira, es una reacción fisiológica totalmente normal apretar las nalgas, contraer la vagina y apretar la mandíbula. Te suena? Aprender a liberar esta tensión subconsciente es fundamental para empezar a liberar y relajar estas zonas. 

Cosas que me funcionan a mí:
Ponte un temporizador en el móvil que suene cada 10-15 minutos hasta que se haga un hábito integrado dentro de ti y cuando suene: Suelta la pelvis, relaja la mandíbula, retira la lengua del paladar y relájala en el fondo de la boca.

Masajea desde el interior de tu boca los músculos responsables de abrir y cerrar la mandíbula. Te sorprenderá darte cuenta de la cantidad de contracturas que tenemos en ellos. Simplemente manteniendo una presión suave allí puede comenzar a liberar algo de la tensión muscular.

Posturas de yoga en cuclillas, el gato o cualquier postura que estire el cuello y abra el suelo pélvico.

Mueve a menudo tu pelvis: en ochos, infinitos, círculos, hacia adelante y atrás, como quieras, pero muévela.

Respiración profunda: Inhala en 4, retén en 4 y exhala en 4. Esta técnica inmediatamente hace que la respiración sea más profunda y más meditativa.

Canta, haz vibrar la boca y la garganta, suelta. Inhala y al exhalar haz un sonido. Suspira con más frecuencia. Esto libera muchísima tensión en la mandíbula.
Prueba y me cuentas!

Fuente : mujeralquimia 
Comparto con amor.