viernes, 9 de marzo de 2018

Para cada dolencia, una música

Musicoterapia, música para curar 🎼🙌🎼

La musicoterapia es una técnica terapéutica que utiliza la música en todas sus formas con participación activa o receptiva por parte del paciente. Todos nosotros sabemos reconocer cuándo una canción nos parece alegre o nos parece triste. Generalmente asociamos nuestro estado de ánimo a la melodía de numerosas obras de todo tipo.
Pues bien, precisamente la musicoterapia recurre a estas melodías como método para curar o reducir diversos problemas de salud.
*La idea de base es reconocer que gran parte de las enfermedades tienen su origen en el cerebro, quien luego transmite a una parte del cuerpo un estímulo determinado que reproduce una enfermedad*
Con la musicoterapia se intenta hacer llegar al cerebro unos estímulos que le lleven a una relajación o anulación de los que reproducen la enfermedad, a través de diversas melodías con las que se pueden conseguir efectos sorprendentes.
Aquí dejamos una lista de obras clásicas y su virtud, que pueden escuchar en una ventana de la PC, mientras siguen trabajando en otra ventana, simultáneamente

*Insomnio:*
Nocturnos de Chopin
(op. 9 No. 3) http://www.youtube.com/watch?v=gCPnUFmIJWM
(op. 15 No. 2) http://www.youtube.com/watch?v=SbAEsaZ8_LM
(o p. 9 n.º 2)  http://www.youtube.com/watch?v=YGRO05WcNDk&feature=related
Preludio para la siesta de un Fauno de Debussy
http://www.youtube.com/watch?v=F5A4CkUAazI&feature=fvw
Canon en Re de Pachelbel http://www.youtube.com/watch?v=hOA-2hl1Vbc&feature=related

*Hipertensión:*
Las cuatro estaciones de Vivaldi
http://www.youtube.com/watch?v=yb8icchy4H4&feature=fvst
 Serenata nº13 en Sol Mayor de Mozart http://www.youtube.com/watch?v=E0Lu-i2ioPc
 Música acuática de Haendel http://www.youtube.com/watch?v=gor3p4OtLfQ
Concierto para violín de Beethoven http://www.youtube.com/watch?v=Qx9LOgSGGqk
 Sinfonía nº8 de Dvorak http://www.youtube.com/watch?v=W5UbrhqdqQE

*Ansiedad:*
Concierto de Aranjuez de Rodrigo http://www.youtube.com/watch?v=RxwceLlaODM
 Las cuatro estaciones de Vivaldit http://www.youtube.com/watch?v=f_pjH2b808w&feature=related
 La sinfonía Linz, k425 de Mozart http://www.youtube.com/watch?v=JcDFZSEGFno

*Dolor de Cabeza:*
Sueño de Amor de Lisz http://www.youtube.com/watch?v=_pysf5ixCTQ
Serenata de Schubert http://www.youtube.com/watch?v=ZpA0l2WB86E&feature=related
 Himno al Sol de Rimsky-Korsakov http://www.youtube.com/watch?v=Y4rTuFS0D3g

*Dolor de estómago:*
Música para la Mesa de Telemann http://www.youtube.com/watch?v=8exrY_VSeZc
Concierto de Arpa de Haendel http://www.youtube.com/watch?v=iBnr6mJZJFg
 Concierto de oboe de Vivaldi http://www.youtube.com/watch?v=jEQ0N9D1NQs

*Energéticas:*
La suite Karalia de Sibelius http://www.youtube.com/watch?v=YXETVI3iKN0
Serenata de Cuerdas (op. 48) de Tschaikowsky http://www.youtube.com/watch?v=EIt5Movn1o4
Obertura de Guillermo Tell de Rossini http://www.youtube.com/watch?v=6y7tjxii2y4http://www.youtube.com/watch?v=tIxIknEONkU

*Para la Sanación y armonía de tu hogar:*
Todo lo de Wolfang Amadeus Mozart http://www.youtube.com/watch?v=df-eLzao63I

jueves, 8 de marzo de 2018

Harry Styles - Sign of the Times


M.Murdock

Las mujeres somos alquimistas,desenterramos las raíces de la violencia,de la destrucción y la profanación de lo femenino y transformamos las heridas culturales.
Las mujeres somos las protectoras del alma de la Tierra, sacamos la oscuridad de su escondite y honramos los reinos invisibles.




LIMPIA, CURA Y SANA


Nos exponemos diariamente a intoxicarnos con: 

Nuestros pensamientos
Nuestra alimentación 
La desconexión de la naturaleza 
Las discusiones
El sedentarismo
La sobre información
Las relaciones toxicas 
La televisión 
Facebook Instagram Psicofármacos, Alcohol, Cigarrillos, Comida chatarra 

El vivir en una gran ciudad hace que esta intoxicación sea más profunda y que nos olvidemos de nosotros mismos, de tener una pausa y conectarnos con nuestra energía y sabiduría interior. Es imperativo limpiarnos, cada uno encontrando aquella forma que más le resuene: hay métodos de limpieza como personas en este mundo. 

Algunas de las más conocidas son: 

Meditar
Ayunar
El contacto de la tierra con los pies, con las manos, con el cuerpo. 
La respiración consciente
Hacernos Reiki
Prácticas de silencio
Yoga, Tai chí, Chi kung, Bioenergética, etc. 

La pregunta es: ¿Vos como te limpias?



Simone de Beauvoir

Que nada nos limite. 
Que nada nos defina. 
Que nada nos sujete. 
Que la libertad sea nuestra propia sustancia.





 
Honremos nuestra sangre
Mujeres, feliz día



martes, 6 de marzo de 2018

Hay solidez cuándo chocan dos nubes?
No. Se funden y se separan.


Algo similar fue amarnos. 


Años guardé arrepentimientos hasta que permitiste quedarte con todo mi aliento.
Ahora inhala y exhala por mí también. 


lunes, 5 de marzo de 2018

Te amo

Y me amo.
Es que amo los ratos que estuvimos juntos.
Cómo olvidar el modo en que recobramos colores, vibraciones, olores y sensaciones.


Nuestros ancestros

Secretos de familia

Cada árbol genealógico acumula información de generaciones. Esta información, como la energía, no se crea ni se destruye, solo se transforma. 

Jennifer Teege tiene 45 años, es alemana, de raza negra, está casada y tiene dos hijos. Hace unos años descubrió, por casualidad, que su abuelo materno era Amond Goeth, comandante de la SS y responsable de un campo de concentración, lo llamaban El Carnicero de Plaszow. En su libro Mi abuelo me hubiera ejecutado narra su historia: Con sólo cuatro semanas de vida, su madre la dejó en un orfanato y a los tres años la adoptó una familia. A partir de ese momento, tuvo encuentros esporádicos con su madre biológica que nunca le contó la verdad: “Estaba tan furiosa con mi madre por habérmelo ocultado, que obvié lo dura que había sido su vida”.

En 2008, descubrió un libro sobre la familia que contaba historias sobre sus antepasados y los horrores que cometió su abuelo. “Una mañana, a los 38 años, fui a la biblioteca y me llamó la atención un libro rojo, ‘¿Tengo que amar a mi padre?’, de un periodista que no conocía. Había fotografías de una mujer que me recordó a mi madre y de una mujer más mayor con el mismo vestido que le había visto a mi abuela”.

“Solo pude empezar mi auténtica vida, tener un identidad, cuando salieron a flote mis historias familiares”

Quiere compartir su proceso porque durante más de 20 años vivió una profunda depresión que, asegura, tiene relación con su herencia: “La vergüenza y la culpabilidad son sentimientos muy tóxicos que afectan a todos tus actos y a toda tu vida”. El sentimiento de culpa queda en el subconsciente aunque ella no haya sido autora de los actos de su abuelo. Dice que les ha contado a sus hijos quiénes son sus ancestros para que así puedan vivir su propia vida.

La información trasgeneracional se puede abordar desde la vivencia personal, como en el caso de Teege. Desde otro punto de vista, existen investigaciones en el ámbito de la psiquiatría como la presentada por Boszormenyi-Nagy y Geraldine M. Spark en su libro Lealtades invisibles en el que sostienen que “la comprensión de las relaciones humanas pasa por la interpretación de las relaciones familiares”. Desde otro punto de vista Nicholas Shea, profesor de filosofía de la Universidad de Londres, habla de “efectos transgeneracionales adaptativos” en su artículo Two modes of trasgenertional information transmission. Y, desde otra perspectiva, la periodista científica Annie Murphy Paul, expone en su charla Lo que aprendemos antes de nacer los principales estudios que constatan que “el aprendizaje más importante ocurre antes de nacer”. Ya en su libro Origins. How the Nine Months Before Birth Shape the Rest of Our Lives explora “¿Qué nos hace como somos?” a través de visitas a laboratorios con investigaciones en proceso y entrevistas a expertos de todo el mundo.

Comprender las memorias transgeneracionales desde el perdón es el primer paso para trascender la información que llevan y poder vivir nuestra propia vida.

El árbol genealógico contiene informaciones fundamentales para nuestro desarrollo. En él se encuentra la explicación de lo que nos gusta y de lo que nos disgusta. Aprender a distinguir las emociones que sintieron nuestros antepasados ante determinadas situaciones nos permitirá comprender la manera de reaccionar que tenemos frente a situaciones que vivimos.

CONCLUSIÓN

Mientras no somos conscientes de la información de nuestro árbol vivimos condicionados por las experiencias de nuestros antepasados. Por su manera de solucionar las cosas, de establecer relaciones y, en definitiva, por su forma de ver la vida. La Bioneuroemoción® sugiere que el tipo de experiencia que vivimos es una resonancia o un eco de una información presente en nuestro clan.




La culpa no es de nadie

Tendemos a pensar que lo que nos sucede viene de fuera, que son los factores externos los que nos hacen sentir de una manera determinada y cuando lo que sentimos no nos gusta señalamos a algo o a alguien como responsable de nuestra sensación.

Al culpar al otro nos liberamos de nuestra responsabilidad. Sin embargo, olvidamos que al renunciar a la propia responsabilidad otorgamos el poder a los demás y nos convertimos en víctimas. “Culpar tiene un coste: la pérdida de nuestra libertad. Además, el papel de víctima trae consigo una auto-percepción de debilidad, vulnerabilidad e indefensión, que son los componentes principales de la apatía y la depresión”.

David R. Hawkins (1927-2012) fue doctor en medicina y filosofía, psiquiatra, escritor e investigador sobre la consciencia. Durante su vida obtuvo numerosos reconocimientos, entre otros, recibió el Premio Huxley por su “inestimable contribución al alivio del sufrimiento humano” y se convirtió en caballero de la Orden Soberana de los Hospitalarios de San Juan de Jerusalén (fundada en 1077) en reconocimiento a sus contribuciones a la humanidad. En su libro Dejar ir. El camino de la entrega, nos habla del apego y de todo lo que hacemos por mantenerlo y nos dice que “el miedo a la vida es en realidad el miedo a las emociones”.

Para Hawkins “los apegos crean una dependencia, y la dependencia, debido a su naturaleza, intrínsecamente lleva al miedo a la pérdida”. Y el miedo nos paraliza, “la mayoría de los "No puedo" son en realidad "No quiero". Tras los "No puedo" o los "No quiero" con frecuencia hay un miedo”.

Y donde hay miedo hay culpa. La culpa es “una auto-condena y auto-invalidación de nuestra valoración y valor como ser humano”. La cuestión es que siempre valoramos lo que nos sucede como bueno o malo, es automático, lo hacemos sin pensar: “¿Por qué debe algo ser siempre "fallo" de alguien? ¿Por qué debe ser introducido todo el concepto de "malo" en la situación en el primer lugar? ¿Por qué debe uno de nosotros estar equivocado, ser malo o culpable?”.

No nos damos cuenta de que encontramos una gran recompensa al culpar a otro de nuestra desgracia: “Conseguimos ser inocentes; podemos disfrutar de la autocompasión; conseguimos ser mártires y víctimas, y conseguimos ser los destinatarios de la simpatía”. No es un deseo consciente sin embargo “es el propósito inconsciente de la culpa”. Lo importante es el deseo de obtener “el castigo de otra persona, y combinarlo con el autocastigo”.

Hay culpa en cada juicio crítico. “La culpa en sí misma engendra sentimientos negativos y los sentimientos negativos en y por sí mismos también engendran culpa”. Y hemos vivido durante tanto tiempo en este ciclo que ni siquiera lo reconocemos. “La culpa es tan omnipresente que sin importar lo que hagamos sentiremos de algún modo en nuestra mente que "deberíamos" estar haciendo otra cosa”. De alguna manera u otra proyectamos culpa sobre el mundo que nos rodea “es por eso que la mayoría de las personas necesitan de un “enemigo”.

Hawkins nos recuerda que “no hay ganador en el juego de la culpabilidad”. Y nos invita a observarnos a nosotros mismos cuando nos dice “el primer paso para dejar de culpa es ver que estamos eligiendo culpar”. Solo al dejar de culpar podemos experimentar el perdón y, como consecuencia sentimos “el resurgir de la energía de la vida, el bienestar y la salud física”.

Perdonar no es reconocer una equivocación, es soltar. Es entregar nuestra percepción completamente, abandonando todo juicio y “dado que todo juicio es realmente a uno mismo, nos hemos liberado en el proceso”.

En Bioneuroemoción® sugerimos que nos relacionamos con nosotros mismos a través de los demás y que podemos convertir toda relación en una oportunidad para conocernos a nosotros mismos. Los otros son espejos en los que tenemos la ocasión de vernos y reconocernos, en los que podemos ver nuestra alma para saber lo que tenemos que trascender, lo que tenemos que sanar. Cuando aprendemos a observarnos liberamos al otro de llenar nuestras necesidades.

Como nos dice Enric Corbera en el prólogo de la edición en castellano de este libro: “Dejar ir enseña que hay que dejar de proyectar la culpa en los demás. Tomamos conciencia de que todas nuestras proyecciones al final se vuelven contra nosotros y, si las liberamos, nos liberamos. Este es el gran secreto para hallar la felicidad aquí en la Tierra”.

Fuente:

Hawkins, D.R., Dejar ir. El camino de la entrega. Editorial El Grano de Mostaza, 2014.



Amar al propio cuerpo por Virginia Gawel