jueves, 30 de enero de 2025

El cuerpo es una prenda sagrada. Es tu primera y última prenda; es lo que llevas cuando entras en la vida y cuando sales de ella, y deberías tratarlo con honor. 


Martha Graham


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 Se nace dos veces, una por manos ajenas, la otra por decisión propia.


Una es un acontecimiento de la naturaleza, la otra es un acontecimiento espiritual.


El primer nacimiento, es la salida del cuerpo materno al mundo exterior.


El segundo nacimiento, es el ingreso a la propia esencia.


Harab Elimelj Bar Shaúl

La acción más pequeña vale más que la intención más grande.

Jiddu Khrisnamurthi

Para Sanar Mi Pasado, tengo Primero Que Entenderlo.


El pasado tiene la misma consistencia que un sueño; es como las cartas del tarot. Son manifestaciones que no tienen una explicación racional precisa. Se pueden interpretar de maneras distintas según nuestro nivel de consciencia. Si el nivel de consciencia aumenta, el significado del pasado cambia y, como el árbol se juzga por sus frutos, si los frutos cambian, el árbol también. Por lo tanto, podemos curar nuestro pasado, entenderlo mejor. Nuestros abuelos, bisabuelos y tatarabuelos sufren su desgracia en nuestro interior; si nosotros nos realizamos, nuestros antepasados, en nosotros, van a realizarse y se unirán a nuestro nivel de consciencia.


Alejandro  Jodorowsky

Quien quiera música en lugar de ruido, alegría en lugar de placer, alma en lugar de oro, trabajo creativo en lugar de negocios, pasión en lugar de tonterías, no encontrará hogar en este trivial mundo nuestro, aún así, nada es imposible. 


¡Persevera!


Hermann Hesse

El juego de los abalorios

El inventario de las cicatrices, en particular las de la cara.

Rara vez piensas en ellas, pero cuando lo haces, entiendes que son marcas que deja la vida, que el surtido de líneas irregulares grabadas en la piel de tu rostro son letras del alfabeto secreto que narra la historia de quién eres, porque cada cicatriz es la huella de una herida curada, y cada herida era resultado de una inesperada colisión con el mundo.


Paul Auster