domingo, 11 de diciembre de 2011


Ahora puedo mirarme,
 y ver más allá del color de mis ojos,
 y el cabello que cae sobre mi frente.
En esta desolada noche,
 en el suave silencio de la sala,
puedo permanecer callada,
observarme  en detalle,
y decir quien soy ...
Algunos sabios tienen la conclusión,  
que sí uno sabe quien es,
ya puede desnudarse en el escenario.
Puede que si,
el dar palabras implica recibir sensaciones
estar apta  para las turbulencias de las olas
y saber que la exposición también es sacrificio.
Ese sacrificio que quita, da, saca, pone, mueve
 revuelve todo, mezcla, arma, desarma,
simplemente para llegar a la sencilla respuesta
de comprender que todavía se respira
se siente, se vive … 



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