Yo nunca paseo por pasear. Es como decidirse a perder vida. Hay que pasear por algo, con una intención más allá del mero paseo: pasear por amor a través de junglas vegetales, pasear en busca de jardines que hagan descubrir misterios en uno mismo y en los demás, pasear para que los paisajes traspasen el alma y le dejen pequeños agujeros por donde entren porque las almas están demasiado cerradas. Pero, ¿pasear porque sí?" Fragmento de ¡Ay, Enrique! por Elvira Orpheé
No hay comentarios:
Publicar un comentario