miércoles, 30 de abril de 2014

Y si el día nublado o el otoño nos pone un poco tristes no olvidemos que todo es CÍCLICO

Instrucciones para reciclar la tristeza."C.Korol

Es recomendable para empezar aclarar que la tristeza no sea descartada en un mínimo recipiente con otros sentimientos parecidos,  pero materialmente diferentes,como el dolor o la melancolía. Hay que saber que la tristeza,demasiado tiene con su propia suerte como para cargar con la suerte de otros y otras.Es conveniente para continuar,que depositemos la tristeza amorosamente en un recipiente suficientemente ancho,como para que no se sienta comprimida,reprimida ni compactada.

Hay que cuidar en todo momento,que la tristeza pura, la pura tristeza,tenga un espacio amplio donde desplegarse con libertad.No hay que temer si en algún momento la tristeza se expande de manera sorprendente, incluso para quienes la sentimos como propia. Alivia tal vez saber el secreto que hoy les cuento en voz baja:
Cuanto mas se expande la tristeza se vuelve mas liviana.Al expandirse la tristeza va transformando su estado de solido a liquido por medio de un recurso que se llama llanto y de liquido gaseoso cuando el llanto caído comienza a volverse nube y nubla tus pensamientos y hasta tus sentimientos.

En cuanto a los pasos concretos para reciclar la tristeza HAY QUE EMPEZAR A ROCIARLA CON LAS CANCIONES QUE NOS REGRESAN A LUGARES CONOCIDOS Y QUERIDOS.
Cuando llegamos,nos acurrucamos con ella en esos territorios y ahí la sembramos con ternura.(de esa que no perdimos jamás).

La tristeza vuelta semilla,es decir, reciclada en primera instancia y sembrada en TERRITORIOS AMADOS, cuando llega su hora germina y se hace planta,flor,fruto. Las flores de la tristeza son de todos los colores y aromas.Podemos reconocerlas por sus nombres, que nosotros elegimos. Los frutos de la tristeza son de todos los sabores,no es verdad que tiene frutos amargos. Sus frutos pueden ser tan dulces,como la tristeza misma en ocasiones.Pero de todos modos es preferible no tragar y menos digerir esos frutos. Los regamos,los cosechamos,los nombramos en nuestras poesías hasta que se caen de maduros.Cuando los frutos caen y se vuelven semillas,se ha cumplido el primer ciclo de su reciclado.

Las tristezas no son tan tristes ni tan necias como para alegrarse de los nuevos ciclos que inicia.




No hay comentarios: