Cuando ponemos el cuerpo mental-intelectual nada más en los estudios que hacemos, aprendemos, sí, pero hay algo que no decanta del todo. Aprendemos desde lo lineal, desde lo analítico, recopilamos, memorizamos, pero el cuerpo emocional, muchas veces, queda afuera. Es adentro del cuerpo emocional en donde tenemos una gran biblioteca akáshica y una gran sabiduría ancestral. Cuando nos permitimos adentrarnos y literalmente hacer una inmersión profunda en aquello que estudiamos, todo cambia. Todo se vuelve vivencial, profundo, interno y nos toca el hueso. Aquello que se aprende así, jamás se olvida.
Aprender con el cuerpo intelectual nos puede hacer inteligentes, pero aprender con el cuerpo emocional , nos hará sabios. Porque intelectualmente, podemos ser un archivo recopilador de información, pero cuando nos permitimos usar el cuerpo emocional, somos empáticos, compasivos, vivenciales, intuitivos, en una palabra, humanos, sumamente humanos.
Reflexiones , se viene la luna en Géminis mañana y el dispositor, Mercurio, en Leo, nos pide ponerle el corazón a la mente.
Julieta Suarez Valente
Aprender con el cuerpo intelectual nos puede hacer inteligentes, pero aprender con el cuerpo emocional , nos hará sabios. Porque intelectualmente, podemos ser un archivo recopilador de información, pero cuando nos permitimos usar el cuerpo emocional, somos empáticos, compasivos, vivenciales, intuitivos, en una palabra, humanos, sumamente humanos.
Reflexiones , se viene la luna en Géminis mañana y el dispositor, Mercurio, en Leo, nos pide ponerle el corazón a la mente.
Julieta Suarez Valente
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