lunes, 27 de abril de 2020

- Te amo.
- ¿Si?
- Sí.
- ¿Guau, seguro?
- Sí, seguro. Nunca antes amé así.
- Y abajo de eso, ¿qué hay?
- ¿Abajo? Creo que te necesito.
- ¿Y más abajo?
- Más abajo tengo miedo.
- ¿Y más abajo?
- ¿Más abajo? Tres cosas que faltan. Mi madre, mi padre y dios.
- ¿Qué faltan o qué sobran?
- Ay. No sé.
- ¿Y un poco más abajo?
- ¿Abajo de ellos? Veo cardúmenes, bandadas, la vía láctea, todos los huesos del mundo, el mar.
- ¡Qué hermoso! ¿Y más abajo?
- No quiero ir más abajo. Abajo de eso hay un espejo.
- ¿Un espejo? ¿Y más, más abajo?¿ A través del espejo?
- ¡Ahí estoy! ¿Me ves? ¡Mirá como pataleo!
- ¡Sí! ¡Te veo! Sos tan linda. ¿Y un poquito más abajo?
- Más abajo no hay nada.
- El vacío, ¿te está mirando?
- Sí.
- Esa mirada es la respuesta. ¿Me amás?
- Está oscuro acá, ya ni sé. Tengo ganas de llorar. Si digo que te amo, ¿te amo?
- Voy a prender la luz aunque ya sea de día.
- ¿Y ahora? ¿Qué hacemos con toda la verdad?
- Mates, nos hacemos unos mates...



No hay comentarios: